El primer libro de Eduard Girbau que ya va por su tercera edición, aborda un aspecto curioso en el ser humano: la reacción a la falta de vínculo. Nos sentimos desvinculados de los demás y del Todo por la manera como funciona nuestra mente, eso genera una herida primordial que tiene unas consecuencias absolutas.

 

Como entre las personas se establecen unos grados de resonancia o de vínculo, también, y debido a la presencia de esta herida, estas resonancias entre nosotros que son detectables por las fechas de nacimiento pasan a tener una significativa relevancia.

 

Según el grado de vínculo que se estableció en la infancia con la madre, con el padre o con los hermanos se construye un patrón de comportamiento que define como son nuestras relaciones de adultos con todas las personas. ¿Descubre cómo?